El ministro de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Felix Bolaños, ha emitido una declaración de reconocimiento y reparación personal a favor de Antonio Morillas Rodríguez, en base a la ley 20/2022 de Memoria Democrática.
Esta declaración acredita la «persecución por razones políticas durante la dictadura franquista» que había sufrido Antonio Morillas, por lo que, asegura el escrito, “tiene derecho al reconocimiento y a obtener la reparación moral y la recuperación de su memoria personal, familiar y colectiva”.
Además, se declara “ilegal e ilegítimo” el tribunal que juzgó a Antonio Morillas Rodríguez, así como los jurados y cualesquieras otros órganos penales o administrativos que, a partir del golpe de estado de 1936, se hubieran constituido para imponerle condenas o sanciones de carácter personal por motivos políticos, ideológicos o de conciencia y creencia religiosa. Además de declarar la “ilegitimidad y nulidad” de sus resoluciones.
En aquella época, Antonio era estudiante de la Facultad de Medina y afiliado al Partido Comunista de España, siendo expulsado de la Universidad de Sevilla por resolución de 29 de marzo de 1968 por el Ministerio de Educación y Ciencia. Además, fue procesado por el Tribunal de Orden Público y, por sentencia de 24 de septiembre de 1972, condenado a la pena de un año de prisión menor “por el supuesto delito de asociación ilícita”. Ingresó en el Centro Penitenciario de Detención de Hombres de Barcelona el día 7 de abril de 1975.
Con este declaración de reconocimiento se declara, por tanto, ilegítima y nula la condena, sanción o resolución dictada contra Antonio Morillas Rodríguez, tanto judiciales como administrativas durante la guerra o la dictadura posterior.