Mateo 20,20-28
ACABAMOS ESTE CURSO de comentarios al evangelio del domingo precisamente el día de Santiago, patrón de nuestro país, España. Y me vais a permitir hacerle un ruego a este apóstol valiente y de fe profunda y sincera.
Ante el interrogatorio intimidante del Sanedrín judío, bajo amenazas de quienes solo querían perpetuarse en el poder dijo Santiago: «Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres», y les dio nuevamente testimonio de la resurrección de Jesús, y de que es el sentido verdadero de la vida de cada persona. Santiago profesó el seguimiento de Jesús con tal fidelidad que se hizo colaborador del acontecimiento más grande de toda la historia.
Y a Santiago le pediría que en esta España nuestra haya profesionales que con fidelidad se entreguen en su profesión verdaderamente al bien común, y ciudadanos que busquen aportar lo mejor de sí a la sociedad.
La necesidad de médicos, enfermeros y personal sanitario verdaderamente profesional se ha puesto claramente de manifiesto en esta epidemia que todavía sufrimos. Pero hacen falta profesores, arquitectos, científicos, empresarios y emprendedores que hagan de su trabajo una verdadera profesión, una entrega fiel al bien común. También necesitamos ciudadanos maduros y responsables que no se dejen llevar mas por eslóganes simplistas y redondos, o por una polarización visceral que quiere resucitar fantasmas del pasado; ciudadanos que se sientan responsables del destino de nuestra tierra; que no se pregunten qué puede hacer mi país por mí, sino qué puedo yo aportar para construir España.
A esta tarea cívica, la fe en Jesucristo, como mostró el apóstol Santiago, tiene mucho, mucho que aportar. Feliz verano.