En 1972 se añadieron estos productos a la aceituna, y en breve se elaborarán potitos de bebés
Pocos saben que en nuestra ciudad se producen cada año más de un millón de cajas de zumos. Se fabrican en la factoría de Libby (situada en la Nacional IV), aunque la mayor parte se vende en Canarias y Portugal. A pesar de que la multinacional americana comenzó a funcionar en Dos Hermanas en abril de 1966 (con el fin de envasar aceitunas para su exportación a Estados Unidos), fue en 1972 cuando la producción se amplió a los zumos y néctares de frutas, así como al tomate frito y al ketchup.
Dos Hermanas marca así un hito en la producción industrial del país, ya que es la primera vez que en España se envasan zumos en frasco de litro y con la novedosa tecnología del ‘Twist-off’: tapas de cierre hermético, capsuladas al vacío con inyección de vapor.
Aceitunas para los cócteles
Inicialmente, la producción se circunscribió al envasado de aceitunas, que el público norteamericano consume sobre todo en cócteles de bebidas. El relleno más corriente es el de pimiento rojo, aunque también de anchoa y, en menor proporción, cebolla, almendra y alcaparra. Para la delicada tarea de llenar el tarro con el fruto (tanto manzanilla como gordal), fueron seleccionadas e instruidas las operarias conocidas por boteras, hábiles especialistas en introducir las aceitunas mediante pinzas en los botes, colocándolas de manera estética y atractiva para el consumidor. Su destreza es tal que pueden llenar un bote en un minuto.
Se acerca Nestlé
Hasta 1968, los almacenes de Dos Hermanas exportaban las aceitunas en barriles a granel. El objetivo de Libby de envasar y etiquetar en origen era el de abaratar los costes. Pero el año pasado (1976) se constató que salía al mismo coste envasar aquí que en USA. Esto ha motivado que en estos momentos Libby se encuentre en negociaciones con Nestlé para integrarse dentro de la gran multinacional y así diversificar más su producción, por ejemplo con bebidas refrescantes con sabor a té (se llamará Nestea) o potitos para bebés. Entre otras novedades, se espera la llegada, desde Suecia, de los nuevos envases de tetra-break, desconocidos hasta ahora en España. Actualmente Libby ocupa a 96 trabajadores (básicamente de Dos Hermanas, Los Palacios y Bellavista), llegando a150 en la época de mayor producción.
Zumos de siete sabores
En Libby se elaboran néctares de hasta siete frutas: albaricoque, melocotón, pera, pomelo, naranja, piña y zumo de tomate. Se entiende por néctar toda bebida que contenga el 60% de zumo de fruta. También se piensa incorporar pronto el zumo de frutas tropicales, conocido por la marca Um bongo. En la foto se observa la nave de elaboración de néctares, con el tanque de preparación de almíbares en primer plano.
{xtypo_rounded4}‘La niña del palito’
Además del envasado a mano llevado a cabo por las boteras, en Libby también se realiza el envasado a máquina, que experimenta los siguientes pasos: 1) Selección, en la cinta de inspección, para eliminar las aceitunas defectuosas u otras materias extrañas. 2) Llenado de los tarros mecánicamente. 3) Lavado seguido de escurrido de la aceituna, en el mismo tarro, varias veces. 4) Adición de la salmuera, que asegura la conservación y el sabor de la aceituna. 5) Capsulado al vacío con inyección de vapor en el espacio de cabeza, con tapas ‘twist-off’. 6) Etiquetado de botes y colocación en cajas. En la imagen, la conocida como ‘niña del palito’, encargada, mediante un golpe seco en la tapa, de comprobar que se ha hecho el vacío.{/xtypo_rounded4}
Las exquisitas boteras
Entre los oficios que desarrolla la mujer relacionados con la aceituna, están los de escogedora, deshuesadora, pesadora, rellenadora y, el más exquisito de todos, el de botera, “trabajo poco conocido pero exquisito consistente en colocar las aceitunas rellenas dentro de los botes con unas pinzas y dándole a todas una misma posición incluso decorativa, buscando ante todo la estética del frasco”. Son capaces de llenar un bote en un minuto. En la foto, línea de boteras de Libby, seleccionadas previamente mediante pruebas de habilidad.
Una gran empresa, una gran familia
Desde los 8 trabajadores que arrancaron la fábrica el primer año, Libby ha llegado a contar con una plantilla de 400 personas (repartidas en dos turnos), 300 de ellos envasando y el resto en otras labores como los faeneros. La transformación que va a sufrir la factoría con la fusión con la multinacional Nestlé dejará la plantilla en 96 operarios fijos. En la imagen, hora del almuerzo en el comedor de la empresa.