El campeonato de Andalucía de Paramotor fue un éxito de participación y público
El pasado día 6 se celebró, como estaba previsto, la primera edición del campeonato de Andalucía de Paramotor en Dos Hermanas, organizado por el club nazareno de esta disciplina y con la colaboración de la Federación Andaluza de deportes aéreos.
A pesar del mal tiempo que hubo en los días anteriores a la jornada, el día del encuentro autonómico amaneció con unas muy buenas condiciones meteorológicas, algo que ayudó a aumentar la espectacularidad que tiene este deporte. 
A primera hora del día empezaron a llegar los pilotos participantes con sus equipos, que se concentraron en la explanada delantera de las gradas del Gran Hipódromo de Andalucía, donde fueron preparándose para participar en las distintas pruebas previstas dentro del campeonato.
La presencia de público fue muy numerosa si se tiene en cuenta el tipo de campeonato y disciplina que se trata, pero los espectadores presentes pudieron disfrutar del vuelo de los pilotos mientras evolucionaban por los alrededores de las instalaciones nazarenas.
El Campeonato empezó más tarde de lo que tenía previsto la organización, pero el fuerte viento que se levantó a la hora del inicio de las mangas y otros aspectos no achacables a la organización impidieron que las pruebas comenzaran a su hora.
En la modalidad del despegue a pie, se proclamó campeón de Andalucía Darío Mateo Jiménez, con 774 puntos, y fue subcampeón de Andalucía Rafael Tena Risket, con un total de 770 puntos. El tercer clasificado resultó Manuel Muñoz Bautista, con 718 puntos.
Los primero clasificados en la modalidad del despegue mecanico fueron: Cristóbal Aranda Navarro , proclamado campeón andaluz con 750 puntos en su haber. En segundo lugar se clasificó como subcampeón de Andalucía, Antonio García Martínez. El tercer puesto de esta disciplina quedó desierto.
Durante el Campeonato hubo un accidente en el que el piloto Juan José Camacho Montoro se vio sorprendido por un rotor que lo tiró al suelo sin que nada pudiera hacer por evitarlo, sufriendo un aparatosa caída de la que está acualmente recuperándose.