Los trabajadores del Hospital de Valme y Tomillar protagonizaron el pasado viernes una protesta contra la decisión de la dirección del centro de reducir la plantilla de vigilantes de seguridad.
Según Antonio Montaño, jefe de personal del Hospital de Valme, “en unos tiempos en los que las agresiones y las amenazas a personal sanitario se hacen cada día más frecuentes, la dirección del Área Hospitalaria pretende reducir en un vigilante la seguridad de ambos centros”. Hasta la fecha ya son más de 1.200 las firmas recogidas de trabajadores y usuarios que explicaban, según Montaño, “cómo han sufrido buena parte de ellos amenazas, insultos y robos en los vehículos estacionados ”.
Ayer martes una representación de los trabajadores del Hospital, sus contratas y el personal de seguridad han sido recibidos por el gerente de Valme, Laureano Fernández, quien se ha comprometido, según Montaño, “a revisar el pliego de condiciones de la nueva contrata y a intentar mantener la plantilla actual”.