Este domingo se mide al Sevilla C en su ciudad deportiva, en un choque con entrada gratuita
La Rociera respira. El paciente al que muchos daban por muerto rezuma la vida. La misma que derrochó este pasado fin de semana en su victoria por 2-1 ante el Alcalá. Un balón de oxígeno que le permite confiar en la salida de los puestos de descenso, de la que le separa apenas un punto.
Desde el pitido inicial los auriazules dejaron entrever que iban a por todas. Apenas 45 segundos después del inicio del partido, Gordi trató de sorprender al meta Guille, quien repelió rápidamente el disparo. Lo que no se podía esperar el cancerbero es que el rechace lo recogió el siempre certero Sema, quien inauguró el marcador en apenas un minuto de partido.
La Rociera iba a por todas. El ritmo de ocasiones no cesó en los primeros compases de juego. En el minuto 2 Gordi volvió a probar suerte y en el 5 fueron Sema y Afonso los que lo intentaron sin mayor fortuna.
Ante el fortísimo arranque de los de Emilio López, en las filas contrarias la reacción no se hizo esperar. En el minuto 7 el ex nazareno Gonzalo y su compañero Álvaro estuvieron a punto de marcar. Suerte que se toparon con la eficacia del portero Rivas, quien abortó las intenciones de ambos.
Sin lugar a dudas, no era el día del Alcalá. Su gran anotador Sergio Berros se lesionó tras un choque con un contrario y para colmo Gonzalo erró de nuevo un intento de gol.
Amo absoluto del partido durante el primer tiempo, la Rociera aminoró la marcha tras el descanso. El Alcalá aprovechó esta circunstancia para imponer su criterio y hacerse fuerte en un partido que hasta el momento se le había hecho cuesta arriba.
Los alcalareños dispusieron de dos ocasiones que el meta Rivas atajó sin problemas.
Pese al incipiente dominio de los visitantes la Rociera volvió a la carga para demostrar su poderío. Vázquez aprovechó un despeje fallido del meta Guille para endosarle a los alcalareños su segundo tanto en contra, lo que le permitió a los anfitriones respirar más tranquilos con apenas media hora de partido por delante.
Poco le duró la tranquilidad a los nazarenos. En el 70 se quedaron con uno menos al ser expulsado Miguelito. A partir de entonces el Alcalá se hizo con las riendas del partido. Fruto de ello fue el gol de Luis en el 82, con el que acortaban distancias.
El encuentro pudo quedar en tablas de no haber mediado el alcalareño Vázquez, quien ante la portería de la Rociera vacía, decidió no marcar para atender a un jugador rival derribado en el césped. Una acción digna de elogio y que grandifica el auténtico juego limpio.
Tras este encuentro, que se prolongó casi hasta el minuto 100, la Rociera aún continúa con opciones de seguir la próxima campaña en 3ª División. Todo depende de lo que haga las dos últimas jornadas de liga que le restan.
La primera cita tendrá lugar este domingo, a las 11:30 horas, en la ciudad deportiva Ramón Cisneros del Sevilla FC, junto a la Universidad Pablo de Olavide. La Rociera espera el calor de su afición. La entrada es gratuita.
