El caso se ha difundido por la red europea a través de la Interpol y la Europol
A punto de cumplirse un mes de la desaparición de Josué Monge García la Policía Nacional sigue investigando en el caso sin que hasta la fecha se haya dado con el paradero del menor, que desapareció de su casa en Huerta Sola el pasado día 10 de abril.
Debido a las dificultades del caso el juez ha decretado el secreto de sumario para evitar que cualquier tipo de información o filtraciones puedan interferir en las pesquisas que estén llevando a cabo en cada momento los cuerpos de seguridad.
El caso se complicó hace dos semanas cuando el padre del menor desapareció del hogar, según la familia, para buscar a su hijo sin que se haya sabido nada de su paradero y su esposa haya podido ponerse en contacto con él. Según María Isabel García, en declaraciones realizadas a Europa Press, su marido, Antonio Monge, padece depresión desde antes de la desaparición de su hijo Josué, si bien precisó que se le agravó a raíz de estos hechos. María Isabel le ha lanzado un mensaje pidiéndole "que vuelva, que tanto sus hijos como yo le necesitamos. Tiene que estar al lado de su familia, dándonos calor unos a otros. Estoy sola al frente de todo y tengo otro hijo menor ante el que me tengo que hacer la fuerte". La matriarca de la familia está al frente de una situación que se alarga en el tiempo, llegando a afirmar que “esto no se lo deseo yo a nadie”.
Según Loli Martínez, vecina y amiga de la familia, “Isabel ha regresado esta semana al trabajo aconsejada por su psicóloga para que comience a rehacer su vida y no se limite a quedarse en casa esperando noticias”.
Renovación de la cartelería
Para que el caso no quede en el olvido, la familia ha vuelto a repartir carteles por toda la ciudad recordando que Josué Monge García sigue desaparecido. Además, desde hace unos días circula por Internet un correo con la imagen del niño y sus datos personales para que sea difundido por toda la red y sea pasado de unos a otros usuarios con el fin de dar con su paradero.
