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    Los talleres infantiles fomentan la creatividad y la colaboración entre alumnos, padres y madres

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    Manualidades, reciclaje, cocina y costura ayudan a desasarrollar habilidades y destrezas

    Los más de cien alumnos de Educación Infantil del Colegio Antonio Gala han participado durante el primer y el segundo trimestre en varios talleres en los que han aprendido, además de algunas nociones técnicas, a interrelacionarse y a desarrollar ciertas habilidades sociales y de destreza manual, tan importantes en los primeros años de la educación del niño.

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    Con los alumnos de las cuatro clases de Infantil se han formado otros tantos talleres, para que así aprendan a conocerse entre ellos y para que los mayores se preocupen por los pequeños y les ayuden incluso a entender mejor las actividades que se realizan en los talleres, con lo que se refuerza la responsabilidad.

    Pasar por todos los talleres
    Los alumnos de Infantil aprenden todas las técnicas puesto que cada grupo tiene que pasar por todos los talleres propuestos y realizar actividades en cada uno de ellos: cocina, manualidades, reciclado y costura, en este caso, los talleres del segundo trimestre. Según la tutora del nivel de 4 años de Infantil del colegio, Gertrudis Hidalgo, a la que todos llaman Yuli, “al alumnado le encanta esta actividad y saben perfectamente qué taller le va a tocar cada semana. Sobre todo disfrutan tanto de las actividades que se realizan como de que su madre o la madre de su amigo sea  su monitora. Otro de los alicientes es que conocen mejor a otros compañeros y cada semana están en un aula diferente a la suya”.

    Los padres ejercen de monitores
    Estas actividades se llevan a cabo los jueves, de 9:30 a 11:00 horas, con la colaboración de las familias, que ejercen como monitores y que, previamente, mantienen una reunión con las profesoras donde se les explica la metodología y las normas y rutinas que se hacen todos los días para que el alumnado no note ningún cambio respecto a sus costumbres de presentarse, lavarse las manos o preguntar cómo lo han pasado con cada actividad. A las familias también les gusta mucho esta actividad puesto que fomenta entre ellas una relación de amistad y son capaces de comprender mejor a sus hijos al conocer cómo se desenvuelven en el aula, en relación con otros compañeros, que se comportan de forma similar.
    Para Yuli “es muy enriquecedor también para las profesoras ya que conocemos mejor a nuestra familia y la relación que tienen con sus hijos, además de aportarnos ideas y comentarnos su opinión sobre los talleres”. Los objetivos de este tipo de enseñanza en los niveles de Educación Infantil son el aprendizaje de una técnica determinada, la interrelación grupal, la adquisición de hábitos de respeto, limpieza y orden; el aprovechamiento y conocimiento de los distintso materiales, la comunicación con niños y adultos distintos y la utilización de los objetos elaborados en los talleres que son de lo más variopintos.

    El árbol goloso
    En el taller de cocina los alumnos se han convertido en cocineros y han elaborado distintos alimentos con galletas, pan de molde, Lacasitos, virutas de chocolate y Nocilla, en lo que han llamado ‘El árbol goloso’. Una vez preparado, ése fue su desayuno en el día del taller de cocina, aunque también han aprendido los cuidados y la higiene que se debe tener a la hora de cocinar.

    Instrumentos con estilo propio
    Otro de los talleres que se han realizado durante el segundo trimestre ha sido el dedicado al reciclaje. En él los alumnos han aprendido a construir objetos con materiales que no hace falta comprar. Con cajas de cerillas, legumbres, papel charol, gomets y ojos móviles los niños de 3 años han elaborado unas maracas; con el cartón de un rollo de cocina, tiras de papel de seda, una gomilla y ceras de colores los alumnos de 4 años han construido un flautín; y los pequeños de 5 años han elaborado una guitarra con una caja de zapatos pequeña, pinzas de la ropa, gomillas y pinturas. Lo que demuestra que no hace falta dinero para tener juguetes, sino grandes dosis de imaginación.

    Cómo es mi papá
    Uno de los más originales es el taller de manualidades, donde este año los pequeños han elaborado con sus propias manos el regalo del día del padre. Cada niño ha modelado a su padre y lo ha descrito con una cualidad que lo define. Según las profesoras ha sido una de las actividades más divertidas, de la que ha resultado un regalo original e irrepetible, que los padres han recibido con el orgullo que merecen estos pequeños artistas.

    Arte en arpillera
    Otro de los talleres ha consistido en iniciar a los alumnos en la técnica del cosido. En los niveles de 3 y 4 años se realiza el trabajo de costura en una cartulina, para después ir aumentando la dificultad. Los alumnos de 5 años ya utilizan arpillera y diferentes lanas de colores y agujas de punta redonda para realizar sus obras de arte, que luego se llevan a casa. Una buena manera de iniciar a todos en las artes manuales, plásticas y culinarias, aprendiendo a la vez que se divierten.

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