El domingo, día 10, tras la Función Principal, el periodista José Manuel de la Linde ofrecerá el Pregón de Valme 2021 en la Parroquia de Santa María Magdalena. Este locutor de Canal Sur Radio pasó los primeros años de su vida Dos Hermanas, de donde es su familia materna. Aquí nace su profundo amor a la Virgen de Valme, devoción que le fue inculcada por sus mayores. Su familia tiene una fuerte vinculación con la hermandad y la romería en honor de la Protectora nazarena desde generaciones, ya que su bisabuelo, Diego Justiniano Lamadrid, fue artífice del exorno de las primeras carretas de flores de papel rizado para la Virgen, en la década de 1920.
¿Había imaginado José Manuel de la Linde que daría alguna vez el pregón de la Romería de Valme?
Para nada porque nunca me he dedicado a la lírica, al margen de la pura información. Me llamó el hermano mayor para vernos en persona y me sonó raro. Después de mucho pensarlo, porque me emocioné mucho, acepté por una serie de circunstancias que tuve el año pasado en cuestiones en salud y por mi devoción a la Virgen y por mi familia materna que está muy vinculada con esta devoción. Sentí que tenía un compromiso con la Virgen para darle gracia porque estoy bien después de pasar un cáncer de colon, ya que en todo momento la tuve muy presente y mi primera salida después del hospital fue para ir a verla. No podía decir que no.
¿Qué prima más el honor o la responsabilidad en este nombramiento?
Hay una responsabilidad tremenda, sobre todo a medida que se acerca, pero también un honor, por supuesto, porque mi familia se va sentir orgullosa de mí y por el hecho de que la hermandad y la virgen se hayan acordado de mí.
¿Puede haber cierta similitud entre su labor como informador y un pregón?
Nuestra tarea es ser cronista de lo que está ocurriendo y de la realidad, por lo que, en parte, lo que voy a hacer es narrar o retransmitir cómo han sido mis romerías desde pequeño e intentar llevarlo a lo general, trasladar mis emociones a todos los valmistas.
¿La Covid-19 tiene que estar presente en este pregón?
Tiene que estar presente porque forma parte de nuestra realidad y la romería se ha visto muy condicionada, sobre todo por toda la gente que ya no está y no podrá vivir más romerías por este virus. Eso sí, siempre desde la esperanza, yo digo que esto es como una Cuaresma larga para empezar a preparar la romería de 2022.
¿Cómo ha sido la gestación del pregón para José Manuel de la Linde?
Me puse el día 2 de agosto, después de volver de vacaciones, y me solía sentar a escribir al mediodía, después de trabajar, con los chorreones de sudor. Me ponía todos los días y me venían idea, incluso cuando iba a nadar, que estaba muy concentrado, aunque a cualquier hora iba apuntando ideas en el móvil. Siempre he tenido una foto de la virgen delante.
«Dar el pregón de Valme es un honor porque mi familia se va sentir orgullosa de mí y por el hecho de que la hermandad y la virgen se hayan acordado de mí»
¿Desde un primer momento, tenía claro lo que querías decir?
No tenía ni idea cuando me lo proponen, ni he pensado un camino o hilo argumental, me han ido viniendo ideas y son pasajes y anécdotas. Me he fijado en convocatorias de romerías y carteles, además de leer escritos de la Virgen y la hermandad para inspirarme.
¿Podría definir el pregón en forma y contenido?
Sentimientos a la Virgen de Valme. A base de releerlo, me he dado cuenta de que hay pasajes en los que se me quiebra la voz y espero poder exponerlo en el atril y no emocionarme mucho porque soy de lágrima fácil.
¿Quién le presenta en ese día y por qué?
Me presenta una periodista de Dos Hermanas y compañera, Ana Giráldez, que es además una buena amiga y buena persona. Es alguien que me conoce bien y quería hacerle este regalo.
¿Qué piensa que se te puede pasar por la cabeza cuando te dirijas al atril este domingo delante de la Virgen?
Me entrarán miles de nervios, porque aunque estemos acostumbrados a hablar en la radio, nos entra el pánico delante de un auditorio. Mi madre estará delante y será muy emocionante y me acordaré de mi abuela Carmen, porque de niño siempre he vivido las primeras romerías a su lado. Me acordaré de ella y se lo dedicaré.
¿Cómo le gusta vivir el Tercer Domingo de Octubre?
Lo he vivido siempre andando con la familia, cerca de la Virgen, desde mi primera hora, además de disfrutar de los previos, que lo vivías con la misma ilusión que una noche de Reyes. Aunque lo más bonito e íntimo es la vuelta, cuando se serena un poco la romería y cae la tarde.
¿Qué le gustaría que quedara cuando termine su pregón?
Estar a la altura porque lo voy a hacer por mi pueblo, mi familia y la Virgen. Quiero que mi pueblo me descubra porque salí muy pequeño y apenas me conoce. Quizás lo que más me puede gustar es que me digan que han vivido la romería y se han sumergido en un tercer domingo de octubre durante ese rato.
