La jugadora nazarena Alba González Pérez debutó el pasado fin de semana en la División de Honor, máxima categoría del balonmano femenino. Lo hizo con su equipo, el Balonmano Adesal Córdoba, en el que milita por cuarta temporada como portera.
El conjunto cordobés se midió al BM Granollers y Alba asegura que “me vi bien, jugué todos los minutos, aunque en la segunda parte nos acusó la semana que hemos estado de parón en los entrenamientos por un positivo en Covid-19”, perdiendo por un marcador de 20-30.
Alba González Pérez, formada en las filas del Balonmano Dos Hermanas, reconoce que se enfrenta a una liga más exigente, “con entrenamientos mañana y tarde”, además de “una gran diferencia de nivel en los rivales respecto a la liga de la que veníamos”.
Su principal objetivo esta temporada pasa por “la permanencia de esta categoría con la que llevábamos varios años soñando”. Para ello, Alba está muy centrada en el presente con su equipo y no piensa en su futuro profesional, afirmando que “Córdoba ya se ha convertido en su segunda casa”.
Durante esta nueva temporada en División de Honor, esta deportista de 22 años compaginará sus entrenamientos con la realización de un máster en Nutrición tras haber completado su graduado en Fisioterapia.