El amarillo y el blanco serán los colores que lucirá esta Romería de Valme la carreta de la Virgen que, como es tradicional, encabezará el cortejo que pondrá rumbo a Cuarto el próximo domingo, día 20. Lo hará con un nuevo manto verde oliva y oro, estreno para la ocasión.
La carreta lleva un total de 150.000 flores de papel de seda rizadas a mano, siendo necesarios unos cinco millones de ‘pellizcos’ para confeccionarlas. Este exorno se completa con 1.000 varas de nardos.
Carreta restaurada
Para esta romería la carreta saldrá a la calle completamente restaurada. Y es que desde el pasado mes de marzo, el equipo de priostía de la Hermandad de Valme ha acometido el proyecto de restauración de la carreta de la Virgen.
Durante este periodo se ha procedido a la reparación integral de la estructura de la misma y se han sustituido todas las maderas que se encontraban en deficiente estado de conservación, debido al paso del tiempo.
También se ha renovado y mejorado la instalación eléctrica, con nuevos puntos de luz. Manteniendo solamente la batea, las ruedas, la viga y las ocho estacas.
La fisonomía de la carreta de la Virgen se mantiene exactamente con las mismas proporciones. Ya que, para la realización de estos trabajos, se ha tenido en cuenta los planos antiguos conservados en el archivo de la hermandad, donde constan las medidas de la carreta.
Nuevo manto verde oliva y oro
La Santísima Virgen lucirá para la Romería de Valme un nuevo manto verde oliva y oro, cuyo diseño bordado se inspira en un antiguo repostero portugués, que se conserva en el Convento de San Francisco de Oporto.
Lleva también motivos basados en un antiguo sobremanto del siglo XIX, perteneciente al ajuar de la Virgen, y que era una de las prendas utilizadas mientras estuvo en candelero.
El nuevo manto verde oliva y oro es obra del Taller de Bordados Santa Clara, bajo la dirección de José Luis Sánchez Expósito.
También estrenará una toca realizada por Alfonso Aguilar con técnica de bolillos, en oro fino, enriquecida con flores de guipur, hojilla, puntos de espíritu y otros motivos. Al igual que el manto, esta pieza ha sido donada por devotos de la Virgen.
