El Partido Popular de Sevilla ha denunciado que la Junta de Andalucía va a cerrar, a principios de febrero, la residencia de grandes asistidos de la barriada de Montequinto, en Dos Hermanas, a pesar del acuerdo aprobado en el Parlamento de Andalucía que instaba a la Junta a su remodelación.
Tras su visita a la nueva residencia Dolorcita de la Huerta, acompañada por el secretario general del PP, Juan de la Rosa, el vicesecretario del PP sevillano, Luis Paniagua, y la portavoz del grupo popular en Dos Hermanas, Mª del Carmen Espada, la presidenta del PP de Sevilla, Virginina Pérez, ha mostrado su asombro “al enterarnos el pasado lunes, tras la visita del viceconsejero de la Junta para enseñar la nueva residencia, que a partir de febrero se cerraría la residencia quinteña y se trasladarían a todos los asistidos a esta nueva”.
“Una vez más vemos cómo el gobierno de Susana Díaz miente a los sevillanos y se salta un acuerdo que se aprobó por mayoría el pasado día 20 diciembre y por el que se instaba a la Junta a no cerrar la residencia de grandes asistidos y a redactar un proyecto técnico que permitiese acometer las obras para su adecuación”, apunta Pérez.
Desde el PP, prosigue, «nos alegramos de la apertura de una nueva residencia que es necesaria, teniendo en cuenta la larga lista de dependientes que existe en Andalucía, pero no podemos olvidar que la residencia de asistidos de Montequinto da cobertura no sólo a la provincia de Sevilla, sino a todo el conjunto de Andalucía, por lo que, con el traslado y el cierre se están perdiendo plazas de residentes”.
El PP recuerda que lleva desde el año 2011 «alertando» de la situación de la residencia, de hecho, en 2014 se aprobó otra iniciativa en el Parlamento Andaluz por unanimidad para llevar a cabo las obras de mejora, adecuación y modernización de la residencia que tampoco se cumplió”, recuerda la secretaria del PP en Sevilla.
A pesar de esta situación, desde el PP de Sevilla, añade, «continuaremos reclamando la rehabilitación de la residencia de Montequinto porque es posible, porque así se ha aprobado en el Parlamento y porque así lo necesitan aquellas personas con sus capacidades físicas e intelectuales mermadas y que estaban a la espera de ocupar una plaza en la residencia de Montequinto”.
