ANIDI sigue en la línea iniciada a finales del año 2014, tras su alianza con el Instituto Lectura Fácil, de apostar por el derecho que tienen todas las personas a estar informadas y a comprender la información que se les transmite. Entre otras cosas, la Lectura Fácil permite a las administraciones que sus mensajes sean comprendidos por el conjunto de los ciudadanos, además de ser la mejor forma de defender los derechos individuales y de garantizar la igualdad entre las personas.
En este sentido, tras subirse al tren de la lectura fácil, Anidi es la única entidad de toda la comunidad andaluza que trabaja verificando documentos. En este sentido, se han verificado trabajos como el Manual de manipulador de alimentos, la Ley y reglamento de la ley de cooperativas, documentos para el Ayuntamiento de Logroño, para el PP (su programa electoral 2015), para el instituto nacional de administraciones públicas (INAP), para la comunidad autonómica canaria (Sta. Cruz de Tenerife y Las Palmas), entidades de Madrid (como Activa Mutua), EAPN (Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español) e incluso para la comunidad andaluza como es el Estatuto de Autonomía de Andalucía o la Carta de servicios de Andalucía Emprende.
Su trabajo consiste en verificar, es decir, comprobar que el documento sea entendido por las personas con discapacidad intelectual y si no es así se proponen posibles formas de entender el texto a través de explicaciones, fotografías, dibujos o planning. Son textos que se facilitan ya adaptados por personal técnico del Instituto de Lectura Fácil. Esta verificación se realiza con el apoyo de personal técnico de Anidi (psicólogo y pedagoga) y un equipo de trabajo formado por personas atendidas en el centro.
Esta labor ya está siendo reconocida a nivel nacional y hemos participado en actos públicos, como las presentaciones de documentos verificados en Madrid o en la defensa de la Lectura Fácil en el Parlamento Andaluz).
En España existen normativas de accesibilidad (Ley 13/2014, de 30 de octubre, accesibilidad de Cataluña, o la Ley 10/2014 de 3 de diciembre de accesibilidad de Galicia) que ya recogen la necesidad de incorporar la lectura fácil aunque aún hay mucho camino por hacer. Mientras que en otros países de Europa las administraciones ya cuentan con periódicos, páginas web e incluso miles de títulos en lectura fácil. En España se van dando pasos muy lentamente aunque progresivamente se va reconociendo a la lectura fácil y la accesibilidad cognitiva como eficaces herramientas para la eliminación de las barreras cognitivas.