Su pasión por el mundo de la interpretación desde muy pequeño lo llevó a que su familia se hiciese cargo de un videoclub para poder tener la oportunidad de ver todas las películas que quisiera. Algo que hacía con otros ojos, ya que lo que más le llamaba la atención era la actuación de su elenco artístico. Ahora él, Samuel García Sánchez, más conocido artísticamente como Sam García, es el que se pone delante de las cámaras para interpretar.
Lo está haciendo desde el otro lado del Atlántico, en México, donde este joven nazareno se está labrando una carrera como actor y modelo publicitario. Hace un año se pudo ver en España uno de sus papeles más importantes hasta la fecha, su personaje de Richie en la telenovela La Impostora, género en el que se está haciendo un hueco y que le está abriendo otras puertas, además de como modelo para revistas, con papeles en alguna obra de teatro y hasta una película. Ya que en el mes de marzo comienza el rodaje de su primer largometraje, 15 minutos antes de llover, “en el que interpreto el papel de un galán que tiene un romance con una de las protagonistas”.
Y si no tuviera suficiente con esto, Sam aprovecha los ratos que tiene libre en los camerinos para escribir guiones, sobre todo uno, “que me gustaría que algún día se hiciera realidad, un musical con temas españoles que fusionen el flamenco con el pop, ya que quiero que el público de México conozcan más la música con la que crecí”.
La intención de Sam García es la de seguir en Distrito Federal “y aprovechar todas las ofertas que me están saliendo”. Aunque a final de año quiere dar el salto a Los Ángeles para “ver cómo se mueve aquello, buscar agentes y ver la posibilidad de mudarme allí”. Sobre la opción de regresar a España, este actor y modelo lo tiene claro, “lo haría encantado, pero con un proyecto seguro”.
A México con escala en Madrid
Mirando atrás, con 29 años, Sam recuerda sus inicios en Sevilla, cuando decidió estudiar en Alcalá de Guadaíra un ciclo de grado superior en Imagen y Sonido, en el que conoció “un ámbito inmenso sobre todo lo que se maneja detrás de cámara”, pero, afirma, “yo quería de siempre conocer el otro lado” y por eso, con 19 años, decide dar el salto a Madrid para “conseguir lo que realmente me gustaba, que era la actuación”.
Fueron momentos difíciles, en los que aprovechó para seguir formándose, estudiando en la Escuela Superior de Teatro (RESAD) o con cursos intensivos de interpretación, uno de ellos con la conocida Cristina Rota. Aunque participó en varios cortometrajes, así como en varios capítulos de series, con papeles pequeños, pruebas tras pruebas “las puertas se me iban cerrando”.
Tras más de tres años en la capital, fue una conocida actriz mexicana, con la que coincidió en un máster interpretativo, quien lo animó para dar el salto a México, algo que Sam García no meditó demasiado, ya que en un mes, cogió todas sus cosas y cruzó el charco. Una vez en México, a finales de 2011, “hice las audiciones para entrar en la escuela de actuación de la conocida cadena de televisión Televisa. A partir de ahí le comenzaron las ofertas, tanto en anuncios de televisión, en series, obra de teatro y las telenovelas.
{xtypo_rounded4}A la hora de hacer balance, Sam García tiene claro que “voy creciendo profesionalmente, algo que me llena de vida y me hace ser más positivo, ya que me voy sintiendo satisfecho por los resultados obtenidos y por las cosas que van a salir pronto”. Por eso, prosigue, “soy de los que piensan que si quieres algo debes arriesgarte y luchar por las metas para conseguirlo. Nadie dijo que sería fácil, pero tenemos que disfrutar su proceso todo lo que podamos”. {/xtypo_rounded4}