El próximo Domingo de Ramos saldrá de una vieja nave en la Cuesta de los Marchaos, decisión que no comparten todos los hermanos
La mañana era luminosa, pero en el aire se respiraba mucha preocupación e incertidumbre. Daban las 11:30 horas de la mañana de ayer domingo, día 9 de febrero, cuando las imágenes titulares de la Hermandad del Cautivo abandonaban el templo de Santa María Magdalena, sede y cobijo de esta cofradía desde su fundación en 1939, y se trasladaban a la Parroquia de Nuestra Señora del Amparo y San Fernando, su nueva ubicación. Nuestro Padre Jesús Cautivo fue colocado en un pequeño paso de caoba de la Hermandad Sacramental, con cuatro faroles plateados. Nuestra Madre María Santísima de la Esperanza fue llevada en andas por sus devotos hermanos.
La decisión del traslado ha creado malestar y división entre los hermanos del Cautivo, aunque ya desde el Cabildo General Extraordinario del pasado día 17 de enero se había aceptado la invitación de los párrocos de Dos Hermanas a abandonar Santa María Magdalena. Desde hacía tiempo insistían los párrocos en que alguna de las hermandades radicadas allí se trasladasen a otras de las parroquias existentes en nuestra ciudad. La filosofía no es otra que la de fomentar la creación de grupos seglares en otras barriadas, en colaboración con los distintos sacerdotes. Esta idea quedó plasmada con claridad durante la Asamblea Interparroquial celebrada entre los días 4 y 6 de enero pasados.
Sin embargo, aunque un sector de la hermandad se siente ilusionado en este peregrinaje a la periferia del pueblo, otros esperaban que el traslado se hubiera hecho de otra forma, por ejemplo a una iglesia nueva que se les prometió construir. Muchos dudan que el emplazamiento de la iglesia del Amparo, con calles oscuras, sea el mejor lugar para invitar y aumentar la devoción a sus Titulares, y que sus condiciones, con un suelo de madera, “viejo, crujiente y temblón”, sean dignas para sus sagradas imágenes.
El próximo Domingo de Ramos, pues, el Cautivo y la Esperanza tendrán un marco diferente para su salida y entrada. Será en una vieja nave de la calle Isaac Peral o Cuesta de los Marchaos.
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Excombatientes de la guerra
La Hermandad del Cautivo fue fundada en 1939 por un grupo de nazarenos devotos, en su mayoría excombatientes y excautivos de la recién terminada Guerra Civil. Su fundador y primer hermano mayor fue José Varela Jurado. El día 4 de septiembre de 1939 la hermandad firma un contrato con el imaginero Antonio Illanes para la ejecución de la imagen del Cristo, por un precio de 6.000 pesetas. En 1940 se produce la primera salida procesional del Cristo en un pequeño paso cedido por la Hermandad Sacramental. Fue todo un acontecimiento en Dos Hermanas. Acompañó al Señor un enorme gentío.
El día 30 de marzo de 1940 se firma con el mismo imaginero el contrato referido a la Virgen, por un precio de 2.000 pesetas, aunque no será hasta 1945 cuando realice su primera salida procesional. Las Semanas Santas de 1941, 1942, 1943 y 1944 los pasos de la hermandad no salen a la calle por la penuria económica de la posguerra, aunque la hermandad sigue creciendo: crea su escudo y se establecen los colores de los nazarenos (túnica blanca y antifaz color verde esperanza).
Otra de las fechas recientes más destacada fue el día 18 de marzo de 1951. El Cautivo cambió su salida del Martes Santo por el Domingo de Ramos, el mismo día en que estrenaba su nuevo paso dorado.
