La pena oscilaría entre los seis y los nueve años, al agravarse el delito por el uso de armas
La fiscalía de área de Dos Hermanas ha calificado el caso de la agresión a dos guardias civiles en el cuartel de Los Montecillos en el mes de octubre de 2009 como «un atentado contra la autoridad agravado por el uso de armas», lo que supondría una pena mínima de seis años y una máxima de nueve para los cuatro sospechosos, tres hermanos y su padre.
No obstante, según publicó El Correo de Andalucía, la acusación particular ha presentado un escrito ante los juzgados alegando que existen indicios para que el caso se califique como tentativa de homicidio, lo que supondría una pena de 10 a 15 años de prisión. Ambos, fiscalía y acusación particular, están de acuerdo en denunciar los delitos de lesiones y desorden público, lo que aumentaría la pena de forma considerable.
La pena empezaría a contar desde el momento de la entrega de Pedro H.R., de 21 años de edad, M.H.R., también nacido en 1988 y Jesús H.R., de 20 años de edad, los tres con varios antecedentes. El arresto del padre, J.H., de 49 años, tuvo lugar en el mismo barrio, donde se produjeron enfrentamientos con los familiares. Los acusados llevan en prisión nueve meses.
Una petición que, días después, fue rechazada por una juez de Dos Hermanas, quien no considera oportuno calificar como tentativa de homicidio, en lugar de un delito de lesiones, el intento de apuñalamiento a un guardia civil durante el ataque de cuatro personas al cuartel de Los Montecillos. Según la magistrada, en informaciones a EFE, de la actitud del acusado «no se desprende una clara intención de matar, sino de lesionar» y de hecho la agresión no concluyó en un resultado lesivo fatal.